A 20 días de la muerte del perro encerrado en el auto, la dueña de la zapatería Malala aún no pudo volver a abrir el negocio
La mujer tuvo que cerrar su local por los escraches y todo lo que vivió luego de la muerte del animal. En ese marco, el comercio aún muestra la persiana baja y la vidriera cubierta por bolsas de nylon negro