Existe una gallina que pone huevos azules: ¿se encuentra en Argentina?

Dentro de cada especie de animales existen diferentes razas con distintas cualidades. En relación a esto existen unas gallinas que tienen particularidades físicas que despertaron curiosidad dentro de la ciencia.

Una de estas especies se llama gallina araucana o mapuche, que además de estar presente en muchos gallineros. Esta especie es única y una de sus particularidades es que pone huevos de un color inusual: azules o verdes.

La gallina araucana o mapuche, muchas veces es considerada, por su docilidad, casi como un animal de compañía. Se trata de un ave muy especial, gracias a su plumaje particular.
La gallina que pone huevos azules: ¿cuál es su historia?
Gallina araucana o mapuche son animales muy sensibles y cercanos al ser humano. Esto los lleva a ser criados cada vez más lejos de los fines comerciales.
Si bien sus orígenes son inciertos existen diferentes creencias míticas sobre sus huevos. Una de ellas es que se supone que la gallina araucana o mapuche proviene de las tribus de esos pueblos originarios que habitaron los territorios de Chile y Argentina.

Se dice que los que viven en esos territorios crearon esta raza mezclando dos razas de gallinas. Además, otro dato interesante es que, gracias al análisis de ADN mitocondrial, se fundamenta la creencia de que los huesos de estos pollos ya estaban en América mucho antes de la llegada de los españoles.

La gallina araucana es originaria de la región habitada por los pueblos originarios que la crearon, pero en la década de 1920 se expandió a Europa y Norteamérica gracias a la venta de sus característicos huevos por parte de piratas y comerciantes.

Esta ave se distingue por tener largas plumas en la zona de la barbilla y las orejas, lo que le da un aspecto similar al de llevar aros o barba. Además, no posee cola plumada debido a mutaciones genéticas. Sin embargo, su rasgo más peculiar son sus huevos, que suelen tener un color azul o azul verdoso gracias a la biliverdina, un pigmento secretado en el oviducto que puede variar en intensidad de un huevo a otro.

La domesticación de la gallina comenzó alrededor del año 1500 a.C. en el sudeste asiático, según investigadores. Desde allí, se extendió hacia el oeste hasta llegar a Europa gracias a los primeros comerciantes marítimos griegos, etruscos y fenicios. Sin embargo, durante muchos siglos, las gallinas fueron veneradas y endiosadas en algunas sociedades humanas, en lugar de utilizarse como alimento.

En resumen, la gallina araucana tiene una historia interesante que abarca diferentes culturas y épocas, y es apreciada tanto por su singular apariencia como por sus valiosos huevos.