Afuera y sin rumbo: Newell’s cayó 1-0 ante Defensa y no pudo clasificar a cuartos.

La ilusión de clasificar a cuartos estaba, pero todos sabían que la misión era complicada. Newell’s necesitaba ganar en Florencio Varela, un reducto donde nunca había podido ni siquiera anotar un gol, pero además debía esperar por ayuda externa, con una combinación matemática de resultados tan compleja como improbable. Neweell’s no hizo su parte y cayó 1-0, y en las otras canchas tampoco había buenas noticias para lamentarse si el equipo de Larriera hubiera conseguido una victoria.

El panorama sombrío inicial de la Lepra se oscureció aún más a partir de las noticias que llegaban desde los otros escenarios. Racing anotó rápido un doblete para aventajar 2-0 a Belgrano y dejar en claro que en ese partido la ayuda no llegaría. Y promediando la primera parte apareció un gol de Lanús ante Estudiantes, justamente el resultado inverso al que requería la Lepra. A Boca le costaba un poco más, incluso hubo una expulsión de Medina que lo puso más cuesta arriba, pero antes de los 45 minutos llegó el gol de Cavani para completar una trilogía de resultados desfavorables para Newell’s.

Si lo que sucedía en otras canchas no ayudaba, Newell’s tampoco se esforzaba demasiado en cumplir con su parte. Y no se trató de falta de actitud. La Lepra desde hace varios partidos se muestra carente de ideas. Y los cambios establecidos por Larriera, con Schott como lateral para mandar a Méndez al mediocampo y armar un 4-4-2 que por momentos fue más un 4-2-3-1, desconcertaron aún más.

Un buen centro inicial de Schott a la cabeza de un solitario Panchito González, que conectó desviado, entusiasmó con un equipo más conectado en ataque. Pero hubo que esperar al cierre del primer tiempo para encontrar otra chance de gol, esta vez con otro cabezazo tras un córner, esta vez de Julián Fernández, que el arquero local sacó con el pie. En el medio de esas dos acciones, Defensa tuvo más la pelota y trató de lastimar por afuera, en especial por la espalda de Schott, una zona siempre desprotegida aunque cambien los laterales que la cubran. Uvita Fernández obligó a una gran tapada de Macagno y luego el palo salvó a Newell’s. Y salvo cuando la pelota pasó por Banega, la Lepra aparecía como inofensivo. En realidad costaba imaginar de qué manera podía llegar al gol.

Newell’s está tan pifiado que en el momento que pudo cambiar el rumbo del partido a favor, terminó siendo su sentencia. Tras una buena jugada Fernández Cedrés le pegó de frente al arco y su remate dio en el palo cuando parecía gol. En la jugada siguiente, cuando todavía la Lepra se lamentaba, Defensa anotó de cabeza tras un córner donde Ramos Mingo apareció inexplicablemente solo en la puerta del área chica.

De ahí en más fue más desconcierto y las chances de igualar fueron escasas. Sumar delanteros con los ingresos de Aguirre, May y Chiaverano no cambió nada. Y el final con derrota mostró a un equipo desdibujado, muy alejado de aquel que inició la Copa de la Liga con cuatro victorias que ilusionaban a los hinchas. Sin boleto a cuartos, pura decepción.